Con los actuales desafíos que ha enfrentado la educación durante el último año, es importante poner atención en las áreas del aprendizaje hemos dejado de lado y en las cuales debemos realizar cambios y mejoras a la hora de enseñar a nuestros alumnos y alumnas.
Existen diversos factores que impactan en el proceso de aprendizaje de cada estudiante y hay ciertas observaciones que podemos tomar en cuenta e incluirlas al momento de planificar una clase. Hoy te compartimos 4 puntos generales para ayudarte a alcanzar una enseñanza sólida en el aula.
Cuatro claves para potenciar el aprendizaje:
1- Mantén el “GPS encendido”:
Cuando salimos de viaje usamos un sistema de navegación, el cual nos indica que ruta seguir y cuanto tiempo nos tomará llegar, al mismo tiempo que nos brinda actualizaciones constantes sobre nuestro progreso.
Como docentes, podemos proporcionar un “GPS” a nuestros alumnos, con instrucciones con respecto a las metas de aprendizaje. Es importante informar a los alumnos sobre el camino que están siguiendo, para que sepan exactamente hacia donde se dirigen y con qué se encontrarán cuando alcancen la meta.
2- Clasificar, conectar y comparar:
A medida que vamos aprendiendo, nuestro cerebro agrupa las cosas a través de categorías, cuando llega nueva información, la clasificamos, la comparamos y tratamos de darle sentido basándonos en categorías similares. Es de gran ayuda en el proceso de aprendizaje de los estudiantes, que puedan definir claramente los conceptos aprendidos.
Para que luego, puedan hacer conexiones de estos, relacionándolos con otros conceptos de manera clara, por ejemplo, a través de gráficos que ayuden a los alumnos a agrupar los contenidos aprendidos en categorías.
3- Interactuar con lo aprendido:
Entre el momento en el que como docentes entregamos el conocimiento a los estudiantes, hasta el cuál son evaluados aquellos aprendizajes, los alumnos deben procesar el material estudiado de alguna manera, para que estén poniendo práctica lo aprendido de manera constante y que puedan aplicar lo aprendido.
Por ejemplo, a través del aprendizaje cooperativo entre pares, un espacio en donde compartan sus enseñanzas durante pausas recreativas dentro del aula.
4- Incluir la práctica de recuperación:
Para trabajar en el enfoque del estudiante sobre el material aprendido, la recuperación es una práctica eficaz. Por ejemplo, realizando pruebas periódicas sobre el contenido del curso, pero cuyo fin no sea la calificación, sino en descifrar cuales son las áreas donde es necesaria una profundización del aprendizaje.
Una manera didáctica de realizar esta práctica, es darles unos minutos a los estudiantes para que puedan escribir todo lo que recuerden acerca de un tema y así, verificar en conjunto sobre la precisión de sus respuestas.
Te invitamos a incluir algunos de estos puntos en el aula, para potenciar el aprendizaje de tus estudiantes. ¿Tienes otros tips?
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Referencia: Cult of Pedagogy